Son enfermedades producidas por 3 virus distintos que
afectan principalmente a niños y que no tienen tratamiento específico:
Sarampión: Es una enfermedad vírica muy contagiosa y que
puede producir complicaciones graves y a veces mortales como neumonías y
encefalitis. Suele comenzar con un
cuadro febril con manchas rojas por todo el cuerpo, tos irritativa y
conjuntivitis (ojos rojos). También aparecen unas lesiones típicas y exclusivas
de esta enfermedad que son las manchas de Koplik que son lesiones blanquecinas
con halo rojizo en la mucosa de la boca.
Rubeola: Es una enfermedad vírica leve pero que si se
contrae durante el embarazo puede ocasionar lesiones graves y permanentes en el
feto (rubeola congénita). De ahí la importancia de estar inmunizado (ya sea con
la vacuna o por haber padecido la enfermedad) en la infancia. Se suele
presentar un cuadro leve de fiebre con manchas por el cuerpo, ganglios en el
cuello, retroariculares y occipitales. También puede haber dolores articulares
(artralgias).
Parotiditis (paperas): Es una infección de las glándulas que producen
la saliva sobre todo las parótidas (que son las de mayor tamaño). Se suele
producir inflamación, dolor y aumento de tamaño de las parótidas. A veces se
asocia a inflamación de los testículos u ovarios y también se puede producir
meningitis pero de características benignas.
El reservorio de estas infecciones es exclusivamente humano
y la vacuna de la que disponemos es eficaz por lo que serían enfermedades
erradicables pero en los últimos años por las migraciones y la constante
movilidad de las personas por ocio, trabajo … ha habido un aumento en el número
de casos sobre todo del sarampión con casos importados que han ocasionado la
recirculación del virus salvaje y el contagio a personas susceptibles de la
comunidad.
Actualmente ha habido un brote de parotiditis sobre todo en niños
que sólo recibieron una dosis de la vacuna triple vírica y también los que han
recibido dos dosis pero una de ellas con una cepa Rubini (Trivaten distribuida
por BERNA) que fue menos efectiva y por ese motivo se retiró del mercado
español. Por esto se está revisando en los centros de salud el estado de
vacunación a las personas nacidas entre el 01-01-1995 y 31-12-1998 y también
las nacidas entre 01-01-1985 y 31-12-1988 y si
no están adecuadamente inmunizados se les está administrando una dosis
adicional de triple vírica.
Estas infecciones se contagian por vía aérea por las
secreciones que se expulsan al toser, hablar … El periodo de incubación es
entre 2-3 semanas.
La vacuna es de virus vivos atenuados y se ponen dos dosis;
una entre los 12-15 meses y otra entre los 3-6 años. Solo si hay una situación
de riesgo de contagio se puede administrar antes de los 12 meses (a partir de
los 6 meses); si esto sucede hay que volver a poner las dos dosis a las edades
indicadas. Si se administra a una mujer
en edad fértil hay que posponer un mes la posibilidad de embarazo. También se
puede administrar a la vez que la vacuna de la varicela pero en sitios
diferentes, si no se pone a la vez hay que separarla al menos 4 semanas.
Con la vacunación se pretende controlar los brotes de
sarampión con sus potenciales consecuencias, los brotes de parotiditis y el
síndrome de rubeola congénita y para ello es importante:
- Alcanzar y mantener coberturas de vacunación superiores al 95% con las dos dosis de triple vírica.
- Recaptar a personas susceptibles que no tengan documentada la administración de dos dosis de vacuna o de inmunidad.
- Sospechar clínicamente sarampión, rubeola y parotiditis para establecer las medidas preventivas correspondientes y realizar la declaración individual y urgente y actuar sobre los contactos de los casos.
La vacuna está contraindicada por reacciones alérgicas graves
con una dosis anterior de la vacuna o si se presenta una enfermedad importante.
También está contraindicada en el embarazo.
La vacuna no está contraindicada con enfermedades leves como
cuadros catarrales, ni en alérgicos al huevo y tampoco es necesario haber
tomado huevo con anterioridad a la administración de la vacuna. Si se hubiera
tenido una reacción alérgica importante con el huevo se conveniente comentarlo
antes de la administración con el pediatra o enfermera.
Con la administración de la vacuna se puede producir una
reacción local y a los 5-15 días puede aparecer fiebre o una erupción cutánea
que desaparecen después.
Actualizado el 5 de Mayo de 2013